Pasear por el centro de Madrid en las horas en las que el sol aprieta se hace menos penoso gracias a los parasoles dispuestos en las calles. Estos, a su vez, como si fueran piezas de un rompecabezas, permiten lograr imágenes de estos conocidísimos edificios teñidos de distintos colores.
Fotografiar el reloj de la Puerta del Sol desde las diferentes calles que confluyen a la misma permiten colorarlo de rojo si se baja por la calle del Carmen o de verde y amarillo si se hace desde la calle Arenal.
De todas las que hice la que más me gustó fue la perspectiva desde la calle Preciados y con esta imagen inauguro un nuevo álbum donde se alojarán fotos de Madrid.
Mira que he pasado veces por allí y siempre hago la toma desde el otro lado :)
ResponderEliminarBuen finde.
coincido con paco, la de fotos que he podido sacar y no vi esa fantastica y original composicion. un saludo.
ResponderEliminarcuriosa toma que no había visto...........
ResponderEliminarbuen ojo,
Y todos los años cambia el color de los parasoles por lo que la misma composición se renueva.
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