Se despejó la mañana y aproveché para acercarme a esta desconocida y solitaria playa en Cervo, más propia de refugio de piratas que de bañistas. Pues ni lo uno ni lo otro, eran cinco jinetes los que galopaban sobre las aguas del río Xunco, que aquí desemboca.
E se vê a areia no ar sob as patas do jinete dianteiro...
ResponderEliminarSaludos.
Precioso lugar también el que muestras en tu foto.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario en mi blog y por seguirlo, yo me apunto al tuyo tambien, me gusta las cosas que compartes con todos en él.
Tambien compartimos página en Flickr.
· Veo tu reportaje sobre la Mariña lucense.
Curiosa y oportuna foto que me recuerda a alguna película...
· Saludos
CR & LMA
________________________________
·
Antonio debido a las circunstancias del momento, hace tiempo que no te visitaba, pero cuando lo hago, siempre me encuentro con la sensible belleza de tus fotografías. Si un día decido hacer un verso de una de ellas, te pediré permiso previo, siempre haciendo alusión al autor y poniendote un enlace al pié de la foto...Un abrazo muy grande de azpeitia
ResponderEliminar