Las nubes intentan superar los impresionantes acantilados de cabo Ortegal aunque no consiguen su propósito. De vez en cuando, un rayo de sol asoma y las gaviotas cruzan el espacio.
Los paisajes me encantan, sobre todo la contemplación serena y el utilizar el resto de los sentidos para percibir toda la belleza del lugar: la fuerza del viento en ese momento, la humedad...
Lo curioso es que cuando siento uno que me emociona y quiero fotografiarlo me pongo nervioso y sólo percibo por el visor. Lo que tiene sus consecuencias...
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Qué complicado es muchas veces meter en una foto los paisajes que vemos, yo por eso no los fotografío :) A tí te quedan de maravilla.
ResponderEliminarSaludos
estupendo ese rayo de sol que has conseguido sacar, felicidades.
ResponderEliminarPreciosa foto, has sabido sacarle a esos acantilados toda su magia y misterio.
ResponderEliminarUn beso
Paco, Luis, Patricia:
ResponderEliminarMuchas gracias.
Los paisajes me encantan, sobre todo la contemplación serena y el utilizar el resto de los sentidos para percibir toda la belleza del lugar: la fuerza del viento en ese momento, la humedad...
Lo curioso es que cuando siento uno que me emociona y quiero fotografiarlo me pongo nervioso y sólo percibo por el visor. Lo que tiene sus consecuencias...
Me impresiona esta foto, es preciosa por las sombras y luces. Muy bonita,
ResponderEliminarAnte todo gracias por visitar mi humilde blog, me has dado la oportunidad de conocer el tuyo. Una pasada de foto. Vaya luz has conseguido. Saludos.
ResponderEliminarPoco que decir, una imagen espectacular! Un saludo.
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