07 septiembre 2015

Las huellas de Encanto, en Rincones de la Mariña


Las pisadas de Encanto.

Dicen las gentes del lugar que en el alma de la roca de esquisto, que pavimenta el estrecho paso del camino entre As Anzas y Salcedo, vive Encanto, una joven rubia de asombrosa belleza. En San Juan, la moza se aparece por arte de magia a los que pasan por allí seduciéndoles con su hermosura.

Leer más.



Las once pisadas de encanto y cuatro cazoletas.

Estas formas salieron a la luz en el año 2010, tras una riada que arrasó la capa de tierra que se había depositado sobre la parte inferior de la rampa pétrea.

Leer más.


Las pisadas de Encanto, un yacimiento arqueológico.

Las pisadas de Encanto son grabados rupestres, los primeros petroglifos encontrados en Ribadeo y los primeros podomorfos de la Mariña. Como tales fueron catalogados por la Xunta de Galicia siendo incluidos en el inventario de Yacimientos Arqueológicos de la Dirección General de Patrimonio.

Leer más.


La interpretación de los petroglifos de As Fadegas.

El profesor Emilio Piñeira Lozano en su cuaderno de investigación Pegadas da prehistoria en Ribadeo recoge las diferentes interpretaciones sobre la representación de los petroglifos conocidos como As pisadas do Encanto, que significado y función podrían tener para las gentes de la prehistoria.

Leer más.



Nuevas interpretaciones de los petroglifos de As Fadegas.

Marco García Quintela, catedrático de Historia Antigua de la Universidad de Santiago y César González García, arquoastrónomo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), un año después de la de los técnicos de la Xunta, que determinaron el carácter antrópico de los grabados en la roca. Sus conclusiones son sorprendentes.

Leer más.

Más lugares en:

http://rinconesdelamarina.blogspot.com
http://www.facebook.com/rinconesdelamarina
#RinconesDeLaMariña

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si el artículo ha sido de tu agrado, ¿por qué no lo comentas?
Y si no te ha gustado, ¿por qué no lo comentas?
¡Gracias por dejar aquí tu tiempo y tus palabras!